Indiscutibles maestros del heavy metal, Judas Priest visitaron España dentro de su polémico Epitaph Tour en el que no figuraba el guitarrista K. K. Downing por haber surgido ciertas diferencias con sus compañeros de toda la vida. Su ausencia no tuvo excesivas repercusiones y los británicos volvieron a exhibir su calidad y experiencia con un concierto espectacular en lo visual y categórico en lo musical.
El retorno de Accept a la actividad puede catalogarse de brillante, además de facturar un competitivo álbum en 2010 Blood Of The Nations, demostraron su jerarquía en directo en 2011 con una gira en la que Mark Tornillo suplió con plenas garantías a Udo Dirkschneider. En Barcelona su presentación fue demoledora con el guitarrista Wolf Hoffmann y el bajista Peter Baltes acaparado protagonismo.
Respaldados por el éxito de The Blackening y las excelentes vibraciones que desprende su último álbum, Unto The Locust, los Machine Head de Rob Flynn desplegaron en España su portentosa vitalidad en directo, respondiendo a la expectación creada con un gran nivel interpretativo y una presencia escénica impresionante, como una perfecta y engrasada máquina de metal.
Hacía algunas “lunas” que Slayer no pisaba tierras españolas pero si hay una banda en el mundo del metal que nunca va a decepcionar esa es Slayer. Una vez más, Kerry King, Tom Araya y Dave Lombardo, en esta ocasión apoyados por Gary Holt (Exodus), sustituto temporal de Jeff Hanneman, arrollaron y expusieron los argumentos que les han llevado a lo más alto del metal de aristas contundentes.
Perpetuando el espíritu de Phil Nynott, la nueva reencarnación de Thin Lizzy exhibió su legado con la elegancia característica de Scott Gorham y el estilo impecable de Viviam Campbell, sin olvidar la vitalidad de Marco Mendoza. Fue una actuación cargada de nostalgia revitalizada por la puesta al día de una serie de canciones que forjaron la leyenda de la formación surgida en Irlanda.
Marty Friedman, lejos ya de su etapa junto a Dave Mustaine, visitó España como artista en solitario arropado por una banda de músicos japoneses que pusieron colorido a una actuación desequilibrante, donde el guitarrista estadounidense exhibió toda la calidad que atesora, sobrado de recursos y sin apenas necesidad de recurrir a las composiciones de la era Megadeth.
Una superbanda que no decepcionó a su paso por España fue The Damned Things. La unión de músicos de Fall Out Boy, Every Time I Die y Anthrax, funcionó perfectamente, repartiendo garra, actitud y ganas de gustar a la concurrencia. El resultado fue un concierto frenético, cargado de adrenalina que ni la ausencia a última hora de Scott Ian pudo desbaratar.
El exceso de decibelios no fue obstáculo para que Zakk Wilde expusiera sus reconocidas habilidades con la guitarra. Su figura dominó con autoridad un concierto donde no faltó el homenaje a Dimebag Darrell ni la clásica incursión solista de recurrencia infinita. Sin duda la combinación de temas de Order Of The Black junto a un repaso de los anteriores discos resultó totalmente convincente.
Dos veces pisaron España Symphony X en 2011, la última de ellas con su nuevo y brillante álbum Iconoclast listo para ser “degustado” en directo. Una vez más, Michael Romeo, Rusell Allen y sus colegas dejaron constancia de la calidad que acumulan, fruto del virtuosismo de todos los componentes de la banda estadounidense cuya relevancia pocos discuten en la actualidad.
El concierto de Virgin Steele en Barcelona estuvo rodeado de esa aureola que hace que un espectáculo crezca a medida que va avanzando y una actuación que se preveía interesante pero discreta supere las expectativas con creces. ¿Los motivos?, el carisma de David Defeis y el decisivo aporte guitarrero de Edward Pursino, además de una compacta sección rítmica formada por Josh Block (bajo) y Frank Gilchries (batería).
Otros conciertos interesantes no han podido entrar en la lista Top Ten porque hay que escoger 10 pero nos dejaron también un excelente recuerdo. Así, se merecen también una mención especial In Flames en la presentación de su polémico Sounds Of A Playground Fading; la excelente impresión que dejaron Saxon abriendo para Judas Priest y la siempre interesante presencia de Megadeth sobre un escenario. Asimismo, los suizos Shakra supieron hacer vibrar al escaso público que inmerecidamente congregaron. Por último, una mención para los españoles Ktulu y su desbordante actuación en el Apolo de Barcelona el pasado septiembre.
Aquí quedan reflejados los mejores conciertos según nuestra subjetiva opinión. ¿Nos hemos dejado alguno de tu preferencia? ¿Crees que determinado no merece estar en esta relación? Entonces opina tú también, déjanos un comentario con tus impresiones.
POR LOCKY PEREZ
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