Entrevista a La Bande: “Los discos no sirven si la gente no te escucha”

Después de su primer disco, La llamada del hombre ciervo (2015), los asturianos de La Bande vuelven con su segundo trabajo: Un cadáver exquisito. Los miembros de la formación son Miguel (guitarra), Xaime (voz y guitarra), Pablo (bajo), Charly (batería), Cristóbal (trombón), Aroa (trompeta) y Guille (saxofón). El grupo responde a nuestras preguntas antes de presentar su último disco en la sala Costello de Madrid el próximo sábado 12 de noviembre junto a los madrileños Cocoa. 

Habladnos un poco de vuestro nuevo disco, Un cadáver exquisito. ¿En qué se diferencia de vuestro trabajo anterior, La llamada del hombre ciervo?

Este es un disco que nos ha costado mucho sacar: hemos estado dos años grabándolo en tres estudios diferentes. Fue un proceso muy largo, pero estamos contentos con el resultado. La diferencia principal es que el disco anterior, La llamada del hombre ciervo, tiene un poso más de folk al uso como se conoce tanto en el folk español como en el folk americano, y en este disco se intenta coger conceptos de la música tradicional, como la muñeira o la copla; cogemos conceptos de la música tradicional española que nos interesa y los llevamos a un concepto más pop, eso es algo que nos gusta y que creemos que puede tener interés, y se ve más reflejado en este disco que en el otro. También es un disco más denso, requiere más escuchas y está más producido, quizá también porque hemos pasado por tres estudios. A nivel musical hay más producción y a nivel de letras es un escalón más también.

El hecho de haberlo grabado, como decís, en varios estudios y durante más tiempo, ¿en qué cosas concretas se aprecia en el resultado?

Esa es una de las razones por las que el disco se llama Un cadáver exquisito. Sentimos que es un poco como el Dr. Frankenstein con su criatura: cachos de un estudio, de otro; durante dos años las canciones también cambian y al final sale este disco, la criatura de Frankenstein. Pero bien, ¿no? Era la hostia la criatura esta. [risas] ¿Cómo se nota? Pues internamente, a nivel de sonido, hay cosas diferentes según un estudio u otro. Se grabó en tres estudios diferentes, no tanto porque quisiéramos, sino por necesidad. En primer lugar, como ganamos el concurso de la Rolling Stone, parte de la grabación estaba pagada por ellos y la hicimos en Madrid; pero era sólo un EP, cuatro canciones, y queríamos sacar un LP, así que nos fuimos a X Studios con Fer Marín, con el que siempre grabamos y estamos encantadísimos, y ahí se acabaron de grabar las canciones, pero aparte grabamos más en otro estudio de Asturias y regrabamos cosas de las que habíamos grabado en Madrid. Un batiburrillo, pero no hay diferencia entre unas y otras, fueron concebidas para el mismo disco.

Hay una unidad…

Sí, sí.

¿Y cómo fue la composición de las canciones de este disco?

Xaime es el alma mater de la banda. Él siempre trae una canción bastante hecha, pero en un formato más acústico, así que luego la adaptamos con la banda. En parte con lo que él propone y también con lo que proponemos nosotros. Pero es una idea bastante formada la que él lleva al local de ensayo. Hay algunas canciones que salen prácticamente como entraron. Un cadáver exquisito, el single del disco, tuvo un proceso bastante jodido; era una muñeira, que va en un compás 6/8, pero quisimos darle un rollo más rockero, por así decirlo, y resultó una mezcla entre un 6/8 y un 5/4 y quedó un compás rarísimo durante las estrofas, pero que mola; es un compás muy raro y que nos costó mucho sacar adelante. A veces se tarda más y a veces menos, pero sí, la idea la trae Xaime y está bastante concebida.

En las letras hay una enorme influencia literaria…

Sí, hay influencias de distintos poetas y novelistas. Por ejemplo, la canción que abre el disco, Ciudad Vilas, hace referencia a Manuel Vilas. De hecho, él es consciente de esta letra; le dijimos “Oye, vamos a sacar esto, ¿te parece bien?” y él dijo que claro. Hay otra canción que se llama Arturo Belano o el Cámping Estrella de Mar, que hace referencia a Roberto Bolaño, que nos mola mucho. Luego hay una canción que se llama El refugio, que está basada en una novela de Cormac McCarthy, La carretera. Y también Plata quemada tiene que ver con una novela. Es normal, porque Xaime está muy metido en la literatura, y eso se ve muy reflejado en las letras de La Bande.

¿Qué expectativas tenéis con el disco?

Nunca se sabe. Pero lo que queremos es presentarlo en el mayor número de sitios posibles, hacer una gira con él. Por eso estamos haciendo un crowdfunding, en parte para pagar ciertas cosas del disco, y en parte para pagar las pérdidas que vamos a tener en la gira. Queremos presentarlo en Madrid, Valladolid, León, Barcelona, Valencia… Al final, de nada vale que hagas discos si la gente no te escucha, así que eso es fundamental.

¿Y cómo veis la acogida que ha tenido lo que habéis sacado hasta el momento: el single, el disco, la respuesta en las redes?

La referencia que tenemos es el disco anterior. Y, si lo medimos objetivamente, cuando sacamos este single con el lyric video tuvo más reproducciones y mejor acogida ya de primeras que cuando sacamos el single de La llamada del hombre ciervo. Nosotros pensamos que a la gente a la que le gustó el primer disco, a la gente a la que le gusta La Bande, le gusta este disco; la gente que comprende el concepto que hacemos es fiel. Lo que queremos es llegar a más gente. Pero bien, estamos contentos con la acogida, sólo hay que ver si va a más.

Ya habéis comenzado la gira, presentando el disco en Asturias [en Oviedo y en Mieres], ¿cómo ha sido la presentación en estas dos ciudades?

Presentamos el disco el sábado pasado en La Lata de Zinc, en Oviedo, el 22 de octubre. Tuvo muy buena acogida, ya habíamos tocado allí hace unos meses. Muy bien por parte de la sala, porque además tenemos muy buena relación, y también de gente, estaba prácticamente lleno, y eso que el sitio es bastante grande. La respuesta del público es buena, el single ves que la gente se lo sabe, y eso también es la hostia desde arriba. Y eso que realmente el disco ha salido hace muy poco.

¿Y tenéis algo especial pensado para Madrid o para otras ciudades que visitéis? ¿Qué vamos a ver?

Para verlo habrá que ir al concierto. [risas] Los conciertos de La Bande son raros siempre, porque Xaime está muy loco. [risas]

¿Hay una parte improvisada?

Por supuesto. Las canciones están ensayadas, pero lo que dice Xaime entre canción y canción es producto de su imaginación. Más que una actuación como se suele ver, hay una parte de monólogo casi.

Los miembros de la formación sois muy diferentes y encima vivís en ciudades distintas, ¿cómo funciona eso?

Muy difícil. [risas] Todos vivíamos en Oviedo o cerca, así surgió La Bande, nos conocimos por diferentes amistades y por un concurso de jazz; La Bande empezó haciendo jazz y ya ves en lo que acabó. Pero con el tiempo Miguel se ha ido a vivir a Madrid, Xaime está viviendo en Barcelona, Charly ha estado viviendo en León, aunque ahora ha vuelto a Oviedo, y ahora Guille, el saxofonista, se nos fue a hacer un máster a Holanda… Es muy difícil, lo llevamos todo lo bien que podemos. Ha entrado una chica nueva que se llama Aroa. Cuando Guille vuelva queremos que la sección de vientos esté formada por tres personas: Cristóbal al trombón, Aroa a la trompeta y él a saxofón. Una sección de vientos de tres personas es la polla.

Y Aroa no se ha asustado de que estéis locos…

Pues ese era un grandísimo miedo, porque sí, somos muy personajes. Pero muy bien, las líneas que están trabajando ella y Cristóbal son brutales.

Os enfrentáis ahora a una nueva etapa, en la que habéis elegido volver al camino de la autogestión y habéis iniciado un crowdfunding, después de haber sacado vuestro disco anterior con La Granja Records, ¿por qué habéis tomado esta decisión?

Principalmente porque creemos que el modelo de la autogestión es el que mejor funciona ahora mismo, y más para una banda novel. Es el que mejor funciona porque, aunque supone más trabajo, gestionas tú tus discos, tus ventas, dónde quieres que se venda esto, dónde no. Realmente ya habíamos autoproducido nuestro disco anterior, lo que pasa es que La Granja Records hizo una reedición del disco. Pero sí, queremos tener control absoluto sobre lo que sacamos, los conciertos que hacemos, queremos moverlo todo nosotros. Tenemos muy buenas referencias de bandas amigas que funcionan con autogestión, creemos que es la mejor manera. Además, con la caída de las discográficas que lleva sucediendo desde hace años… para nosotros es la mejor opción.

Habladnos un poco de ese crowdfunding.

El crowdfunding es, en parte, para poder terminar de pagar algunas cosas del estudio y, sobre todo, para financiar esa gira que vamos a hacer. Además hay un montón de cosas: tenemos discos, vinilos, ¡que nunca habíamos hecho vinilos y nos hacía mucha ilusión! También hay camisetas y una bolsa de estas para llevar las barras del pan que es maravillosa. La meta es de 2.000€ y aún queda bastante, así que esperamos llegar. Hay que promocionarlo a tope.

¿Qué próximos proyectos tenéis?

Aparte de los conciertos, tenemos la grabación de nuestro próximo videoclip. El single ha salido con un lyric video que ha hecho Pablo García Robla y ahora queremos hacer un videoclip, aunque tenemos dudas sobre la canción que vamos a elegir. Y, en segundo lugar, el próximo fin de semana vamos a grabar una canción para un disco que se hace en Asturias que se llama Bestiario, en el que participa también, por ejemplo, Nacho Vegas, y otros grupos y cantautores de allí. Consiste en coger canciones tradicionales asturianas, pasarlas por el filtro de cada banda, regrabarlas y que formen parte de un disco. Ya es la segunda edición que se hace, la primera salió muy bien. La canción que haremos nosotros se llama La raposa y es un poco gore, habla sobre un zorro que engaña a las gallinas de un corral diciéndoles que es mejor que los humanos porque no piensa cocinarlas. Va de esto la canción y es para niños, ¡flipad! Esperamos que si esto lo escuchan los niños no cojan la idea del todo, por lo menos. [risas]